El colombo-uruguayo Julio Comesaña, exentrenador y figura histórica del Junior de Barranquilla, repasó, en diálogo con Emisora Atlántico, la similitud entre el cuadrangular de 1993 —año en el que el equipo fue campeón bajo su conducción— y el que disputa actualmente el club.
Comesaña reconoció que, aunque se trata de “épocas distintas y equipos diferentes”, el conjunto rojiblanco mantiene su identidad competitiva en un grupo “muy parejo”, donde se marcan pocos goles y las diferencias son mínimas.
Al referirse a los empates conseguidos por Junior en condición de visitante, el exestratega consideró que son resultados valiosos en un cuadrangular tan equilibrado. También analizó el papel de los rivales y opinó que América es el equipo “más débil”, por su constante cambio de jugadores y entrenadores.
Claves del buen momento del Junior
Comesaña destacó varios aspectos tácticos que, en su criterio, han fortalecido al equipo:
- El rendimiento del arquero, a quien calificó como pieza determinante por sus atajadas recientes.
- El regreso de Germán Peña, que aportó solidez defensiva antes de su expulsión.
- La función de Víctor Cantillo y Fabián Ángel, quienes brindan equilibrio entre ataque y defensa.
- La nueva posición de Déiber Caicedo (‘Enamorado’), ubicado ahora por dentro para aprovechar su velocidad y recibir en espacios libres, lo que incrementa el riesgo en ofensiva y complementa a Carlos Bacca y Roberto Hinojosa, según el planteamiento.
“Junior está jugando bien, y cuando no lo hace es porque también enfrenta rivales de gran nivel”, afirmó el exdirector técnico, insistiendo en que el equipo genera entusiasmo y está bien encaminado hacia un desenlace positivo.
Lo que debe pasar en el grupo: mirada a los rivales y cuentas para clasificar
Consultado sobre el duelo América vs. Medellín, Comesaña fue directo: “Si Medellín quiere llegar a la final y aprovechar la ventaja deportiva, debe ganarle al América. No tiene otra”.
De no hacerlo, señaló, el panorama se inclinaría hacia un mano a mano entre Nacional y Junior.
Además, proyectó el camino rojiblanco: Si Junior gana los dos próximos partidos en casa —frente a Nacional y América— sumaría 11 puntos, una cifra que lo dejaría muy cerca de disputar la final.
El exentrenador recordó la tabla de posiciones del cuadrangular de 1993, donde Junior clasificó con siete puntos, igual que Medellín, seguido por Nacional y América con cinco unidades.
Comesaña cerró la conversación con un deseo compartido por toda Barranquilla: “Sería una noticia extraordinaria para la ciudad cerrar el año con Junior en la final”.