La Federación Mundial de Atletismo implementará una nueva normativa que exigirá pruebas genéticas obligatorias para confirmar el sexo biológico de las atletas que deseen competir en la categoría femenina. Esta medida entrará en vigor el 1 de septiembre de 2025 y se aplicará por primera vez en el Campeonato del Mundo de Atletismo que se celebrará en Tokio a partir del 13 de septiembre del mismo año.
Según la entidad, todas las atletas deberán someterse, una única vez en su vida, a una prueba para detectar el gen SRY, considerado un indicador fiable del sexo biológico. Esta prueba se podrá realizar mediante un análisis de sangre o una muestra de mejilla, dependiendo del caso.
El protocolo de pruebas estará bajo la supervisión de las federaciones miembro, que serán responsables de preparar a sus atletas y equipos de acuerdo con esta nueva reglamentación de cara a las competencias internacionales.