El médico pediatra Gustavo Romero hizo un llamado al gobernador del Atlántico, Eduardo Verano, para que preste mayor atención a la situación de la ESE UNA Universitaria, con la misma dedicación según dijo con la que respalda a la Universidad del Atlántico.
Romero manifestó que la Secretaría de Salud Departamental debe revisar la habilitación que acredita a esta entidad para la prestación de servicios de alta complejidad, al considerar que actualmente no cuenta con las condiciones necesarias para ofrecer este tipo de atención.
“Que le ponga corazón como lo hace con la Universidad del Atlántico. La salud no da espera, y los dineros en la ESE UNA pasan de un bolsillo a otro”, expresó Gustavo Romero, al insistir en la urgencia de tomar decisiones de fondo.
Asimismo, el pediatra denunció que algunos médicos de la ESE UNA estarían siendo amenazados con despidos si insisten en reclamar el pago de salarios adeudados, una situación que —advirtió— afecta la estabilidad laboral del personal y la calidad del servicio de salud que se presta a los pacientes.